En Durango murió migrante que cayó de «La Bestia»

El sujeto se deslizó de un vagón del tren en movimiento, cayendo entre las vías, provocando que falleciera casi instantáneamente por múltiples mutilaciones; no ha sido identificado

Un suceso trágico y desafortunado sacudió a la comunidad de Estación Acacio, municipio de San Juan de Guadalupe en el estado de Durango, el domingo por la mañana. De acuerdo con el medio de comunicación Telediario, un individuo masculino, presuntamente migrante, sufrió un accidente fatal mientras viajaba en el tren que atraviesa el país conocido como “La Bestia”.

La información menciona que el sujeto se deslizó del vagón en movimiento, cayendo entre las vías del tren. Como resultado, fue arrastrado a lo largo de varios metros, lo que provocó su muerte casi instantánea debido a las múltiples mutilaciones sufridas. Este lamentable incidente puso fin a su esperanza de alcanzar el sueño americano, un objetivo que comparten muchas personas en situaciones similares.

Los restos del desafortunado viajero fueron descubiertos en la comunidad mencionada. De inmediato, varias fuerzas de seguridad acudieron al lugar para resguardar la escena. Las autoridades ayudaron para el levantamiento del cuerpo así como un agente investigador del Ministerio Público (MP) también estuvieron presentes para registrar oficialmente la muerte y llevar a cabo las investigaciones necesarias.

Posteriormente, el cuerpo fue trasladado a la morgue de la Región Laguna para la autopsia requerida por la ley. Hasta ahora, el individuo no ha sido identificado. Según la descripción proporcionada por las autoridades, el joven estaba vestido con un pantalón de diseño pixelado en negro y gris, shorts oscuros, bóxer rojo, una camiseta deportiva azul marino, una sudadera negra con mangas rojas y blancas y zapatos deportivos negros y blancos de la marca Puma.

Además, se identificaron varios tatuajes en su cuerpo, incluyendo uno en el antebrazo derecho con el nombre “Yulimar”, otro en el pecho que decía “Dios y Madre”, una estrella tatuada en el cuello cerca de la oreja derecha, y una cicatriz de aproximadamente 7 cm de longitud en el abdomen.

Esta muerte sirve como un duro recordatorio de los riesgos extremos que enfrentan los migrantes en su búsqueda de una vida mejor que además de exponer su vida en el trayecto del tren se enfrentan a robos y demás situaciones.